Horda de manifestantes utilizó huaracas y piedras para impedir que la Policía Nacional despeje la Panamericana Sur. Además, un bebé muere en Cusco porque el vehículo que lo transportaba fue impedido de avanzar a un centro de salud.

La ola de violencia no tiene cuándo acabar. Ica vivió su jornada más violenta desde que manifestantes bloquearan tramos de la Panamericana Sur, hace siete días. Una enardecida turba atacó ayer con piedras a un contingente de la Policía Nacional que buscó despejar la vía a la altura del kilómetro 283, sector agrícola conocido como Barrio Chino, y también en el kilómetro 290, del distrito de Salas Guadalupe. El saldo fue de 57 agentes heridos, de los cuales uno se encuentra luchando entre la vida y la muerte.

Corresponsales de Perú21 en Ica detallaron que el hospital Santa María Socorro y el Hospital Regional de Ica recibieron a los agentes atacados y también a otros seis civiles heridos.

El caso más grave es del suboficial de tercera Joel Montañez Colque, quien fue golpeado salvajemente por la horda, que, sin compasión, le habría causado fracturas en la cabeza y extremidades.

Uno de sus colegas grabó el instante en el que la víctima era subida a un patrullero para ser evacuado a un centro de salud de la zona. En los registros audiovisuales se escucha que los manifestantes, que protestan en contra del gobierno de Dina Boluarte, piden asesinar a Montañez.

Debido al bloqueo de las vías, se dispuso el traslado del agente Joel Montañez a un hospital de Pisco. Otro de los policías heridos es Fernando Ortega Miranda, quien ingresó al nosocomio con el diagnóstico de policontuso con herida expuesta en la cabeza, producto de una piedra lanzada por los extremistas.

En los videos también uno de los agentes pide más municiones. “Nos hemos quedado sin nada”, reclama durante la transmisión. La Defensoría del Pueblo reportó que las fuerzas del orden tuvieron diversos enfrentamientos con los manifestantes que impiden el paso de las unidades de carga pesada que desde hace una semana no pueden desplazarse a su destino.

Pero no fue lo único. La Defensoría reportó, además, que desadaptados obstruyeron el pase de una cisterna que se dirigía a apagar un incendio de la I.E. Juan José Salas de Villacuri y atacaron a una ambulancia. Los manifestantes atentan contra sus propios conciudadanos.

Bebé muere en Cusco

Cerca de la medianoche de ayer se registró una nueva víctima a causa de los bloqueos de carreteras. Se trató de un menor de edad de apenas un año y nueve meses que era trasladado de urgencia por sus familiares desde el distrito de Lucre, provincia de Quispicanchi, al centro de salud San Jerónimo, en Cusco, por presentar una infección estomacal.

La VII Macro Región Policial de Cusco informó que, al entrevistarse con la madre del menor Berta Huanca (35), les refirió que, cuando se dirigían en un carro particular evacuando a su hijo, tuvieron problemas en el traslado debido a que los manifestantes en el distrito de Oropesa les negaron el paso, lo que impidió la atención del menor de iniciales Y.O.H. a tiempo, con lo cual llegó sin vida al nosocomio. Con este es el tercer menor fallecido a causa de los bloqueos. Los otros fueron en Lima y Puno cuando vándalos impidieron el paso de las ambulancias.

Desde que se iniciaran las movilizaciones en diciembre de 2022, 10 civiles murieron por accidentes de tránsito y hechos vinculados al bloqueo.

Por otro lado, la Policía también reportó ayer nuevos daños a la vía férrea de la ruta Cusco-Puno de la empresa Ferrocarril Trasandino SAC, sector conocido como Accopampa. Según la PNP, en el puente de evacuación de aguas pluviales, cinco de sus durmientes de madera fueron quemados y afectaron la estructura de la línea férrea.

De acuerdo con las primeras diligencias, detrás del ataque está un grupo de violentos manifestantes que acatan el paro indefinido de la macrorregión sur. La Fiscalía local ya investiga el atentado.

Puno y Ucayali

El Ejecutivo prorrogó por 10 días el toque de queda en Puno a fin de controlar el orden público tras las violentas marchas, donde se registraron ataques contra comisarías, sedes fiscales y judiciales.

A su turno, en Ucayali, la carretera Federico Basadre está bloqueada en cuatro tramos. La Asociación de propietarios de grifos de Pucallpa, a través de un comunicado, pidió a los protestantes que dejen pasar a los vehículos cisternas. De continuar los bloqueos, los combustibles comenzarán a escasear, además, los alimentos de primera necesidad seguirían el mismo destino y los precios se elevarán por el desabastecimiento. Es el resultado de una nueva jornada de terror. (Perú 21).

Deja una respuesta