Poniendo freno a la contaminación y al tráfico de terrenos, y manteniendo el principio de autoridad el área de Fiscalización Administrativa y Control, y el apoyo del Serenazgo de la Municipalidad de Carabayllo, intervino una zona ubicada en la faja marginal del rio Chillón dónde presuntos delincuentes habían retirado los bloques de concreto que meses atrás habían sido instalados por la misma Municipalidad, ahí mismo se encontraron varios camiones arrojando desmonte, los mismos que fueron trasladados al depósito Municipal.
«Los bloques de cemento se instalaron para impedir que los camiones arrojen desmonte al río, los materiales arrojados reducían el cauce y creaban espacios que los traficantes de terrenos aprovechaban para lotizar y vender a incautos y a la gente pobre», señaló el coordinador general de Fiscalización Administrativa y Control, quién luego de verificar la reinstalación de los bloques de concreto, aseguró que montará vigilancia permanente hasta fin de año a fin de evitar estos delitos.
Recordemos que en los últimos meses se han arrojado al cauce del río Chillón más de mil toneladas de desmonte de las obras que se ejecutan en Lima Norte, lo que ha generado preocupación ante un posible desborde del afluente.
Las toneladas de desmonte han bloqueado una parte del cauce y ante el inicio de la temporada de lluvias en la sierra el peligro de un desborde del río Chillón es latente.
Finalmente, la autoridad municipal señaló que se ha establecido que el desmonte proviene de las grandes construcciones de obras públicas y privadas que se ejecutan en los distritos de Lima Norte.